Los pigmentos proceden de tierras minerales naturales.
Las tierras minerales corresponden a sustratos naturales inorgánicos de gran poder colorante, indicadas para la preparación de todo tipo de pinturas.
Poseen una muy aceptable solidez en trabajos al exterior.
Todos los tonos pueden mezclarse entre sí sin que exista posibilidad de alteraciones químicas por ello.
NOTA IMPORTANTE: la tonalidad real del pigmento puede diferir notablemente de las fotografías.